Durante el año 2022, la escalada del precio de la electricidad ha sido muy notoria, afectando a la gran mayoría de puntos de suministro acogidos a tarifas del mercado regulado y libre. Es por ello que el Gobierno aprobó en el RD-ley 10/2022, de 13 de mayo, el famoso “tope de gas” o “mecanismo ibérico”. El “tope de gas” se trata de una medida para reducir el coste de producción de tecnologías que emplea este combustible. Entró en vigor el 15 de junio, y tendrá un año de vigencia (hasta el 31 de mayo de 2023). Los primeros 6 meses, el límite al precio del gas para la generación será de 40 €/MWh, subiendo 5 €/MWh cada mes tras estos 6 primeros, haciendo una media de 48,8 €/MWh durante este periodo.

Con este “tope de gas”, el efecto se observa en el precio del mercado mayorista (pool), ya que tecnologías como la cogeneración y ciclos combinados no entran en participación en la casación horaria con precios tan elevados. A su vez, tecnologías que entraban en el mercado aprovechando su coste de oportunidad, se verán afectadas por el mecanismo y “obligadas” a lanzar ofertas de generación a un precio menor.

Efecto del tope de gas en consumidores
El efecto en el mercado mayorista se produjo de manera instantánea el día en que entró en vigor el RD – ley, pasando de precios de en torno a 200 €/MWh a precios de media de 130 €/MWh. No obstante, a esta disminución de precio ha de tenerse en cuenta el “precio de ajuste a los consumidores”. Este ajuste se incluye dentro de la confección del precio de la energía, en el término de Servicios de Ajuste, con valores más altos de lo esperado. De esta manera, lo que repercute a consumidores sería la suma: Precio del pool + Ajuste a los consumidores.

Los primeros días de aplicación del RD – ley sucedían unos precios en el mercado mayorista superiores incluso a los que marcaba el pool días anteriores. El propio día 15 de junio se obtuvo un precio en el pool de 165,59 €/MWh + 59,68 €/MWh del precio de ajuste. Un total de 225,27 €/MWh, siendo este el precio más alto que se dio en el mes de junio hasta esa fecha (en Europa también, dándose un precio medio de 230€/MWh).

Tras el paso de los días y con el fin de las olas de calor, se obtienen precios más baratos a aquel entonces. También el efecto del “mecanismo ibérico” se percibe en la diferencia de precios con países vecinos como Francia. A fecha de 5 de julio, el mercado mayorista en España arrojó un precio de 139,16 €/MWh + 92,58 €/MWh de servicio de ajuste, un total de 231,74 €/MWh, mientras que Francia marcaba un precio de 371,60 €/MWh. Una diferencia de casi el 40%.

 

Figura. Precios Mercados Europeos de 15/06 – 05/07. [Fuente: e.sios]

Se puede deducir que sin el “tope de gas”, España también tendría precios rondando esos 300 €/MWh, por lo que el efecto en consumidores es más que notable. Sobre todo, para aquellos consumidores que estén acogidos a mercado regulado (PVPC) y tarifas indexadas, pues la confección del precio en sus facturas depende de lo que suceda en el mercado mayorista.

Conclusión sobre este “tope de gas”
Como conclusión a este breve artículo, el “mecanismo ibérico” o “tope de gas” es una medida que, si bien reduce los precios abusivos de la electricidad, no es la panacea al problema. Además, este RD – ley recoge una bajada del IVA del 10% al 5 %, que también repercutirá en la disminución de la factura eléctrica. Medidas que pueden dar un respiro al consumidor, pero que han de seguir teniendo en cuenta los precios altos en materia de su factura eléctrica, por lo que puede ser interesante no perder de vista la gestión proactiva de nuestros consumos: trabajar en la eficiencia energética de nuestro consumo, energías renovables para combatir picos de consumo a coste 0, negociación de contratos de suministro más competitivos… Todas las medidas y acciones han de centrarse en un objetivo claro: la disminución del coste de la factura eléctrica.

Gabriel Flores Andújar
Responsable de Dpto. de Ingeniería de AGROENER
www.agroener.com