La escandalosa inclusión del IVA de Acuaes por Breña II y Arenoso, motivo más que suficiente para hacerlo.

Feragua recurrirá, un año más, los cánones y tarifas anunciados para 2021 en la Cuenca del Guadalquivir. Dos son las razones le impulsan a ello. La primera es la inclusión, en el cómputo de las partidas que forman el canon, de costes que no son imputables a las obras de regulación. Se trata de inversiones que entendemos que deben soportar los presupuestos generales del estado y no el conjunto usuarios porque son medidas que benefician al conjunto sociedad y no tienen afección directa sobre regadío. Dicho de otra forma, se está haciendo pasar carne por pescado para que los regantes paguemos más de lo que nos corresponde.

La segunda razón es si cabe más importante y decisiva. La inclusión del IVA en la factura que ACUAES remite anualmente a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir por la explotación de los embalses de La Breña II y Arenoso, que rechazamos de forma frontal y nos indigna sobremanera pues si esos embalses fueran gestionados por la CHG, como sería lógico, no habría IVA que abonar y además pagaríamos menos costes por pura economía de escalas.

Desgraciadamente, las propuestas de cánones y tarifas vienen a ser todos los años el punzante recordatorio de que todo sigue igual y las competencias de Breña II y Arenoso siguen en manos de Acuaes y no de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, como llevamos años demandando. En agosto de 2020 en estas mismas líneas anunciamos que era un tema próximo a desbloquearse. Eso nos habían asegurado fuentes más que directas. Lamentablemente, hoy tenemos que reconocer que pecamos de ingenuos porque el tema sigue estancado. A los cánones y tarifas y al sangrante IVA de estos embalses recogido en ellos, nos remitimos.