Barbate, la Axarquía, la Regulación General del Guadalquivir y el Bembézar-Retortillo, sistemas en situación muy comprometida.

Las lluvias de diciembre ayudaron a aliviar la situación hidrológica pero, en la mayoría de las cuencas, esta sigue siendo muy preocupante y peor incluso que la que teníamos el año pasado por esta época. En concreto y de forma muy resumida, esta es la situación actual, cuenca a cuenca.

-El Guadalete Barbate se encuentra al 30% de su nivel de llenado, más o menos igual que el año pasado en estas fechas, estando bastante peor el Barbate, con un 24%, frente Guadalete, con un 32%. En el momento actual, la Cuenca está estable, sin nuevas aportaciones.

-El Tinto Odiel Piedras está un poco peor que hace un año, en el 49% frente al 52%, y además está empezando a perder agua debido a la necesidad de riego.

-La Cuenca Mediterránea Andaluza, al 38%, está mejor que el año pasado, que estaba al 31%, pero con un problema de emergencia en la Axarquía, que se sitúa al 11%, lo que supone una verdadera amenaza a los cultivos subtropicales de la zona. En general, el balance de salida y entrada de agua es neutro, más bien empezando a perder.

-El Guadalquivir está al 25%, frente al 28% del año pasado, creciendo tímidamente. El Sistema Regulación General, el más importante para el regadío, está sin embargo peor: al 22% frente al 24% año pasado. En situación muy preocupante se encuentra también el sistema Bembézar-Retortillo, al 16% frente al 28% del año pasado, lo que supone que todos los recursos que contiene en este momento son para abastecimiento.