Así lo defendió nuestro presidente, José Manuel Cepeda, en una Jornada Internacional sobre Sequía y Cambio Climático organizada por Emasesa.

El presidente de Feragua, José Manuel Cepeda, defendió para microembalses y presas estratégicas la consideración de infraestructuras verdes, por su papel fundamental contra la sequía y la desertización, y por sus beneficios probados para la biodiversidad, la absorción de CO2 y el equilibrio demográfico de la España rural. “Hay que cambiar la narrativa de las obras de regulación, como se ha cambiado la de la energía nuclear, que ahora tiene la consideración de energía verde por su importancia estratégica para el futuro de Europa”, ha explicado el presidente de Feragua, que ha añadido que el cambio climático debe ser combatido con un plan de presas y balsas para todo el territorio español.

Esas declaraciones las ha realizado en el marco de la Jornada Internacional sobre Sequía y Cambio Climático organizada por Emasesa y celebrada la semana pasada. Nuestro presidente intervino, junto a los representantes de otras cuencas españoles muy castigadas por la sequía, en una mesa redonda titulada “Gestión de la sequía en el regadío”, que estuvo moderada por el presidente FENACORE, Andrés del Campo. Tanto José Manuel Cepeda, como José Joaquín Gómez Alarcón, presidente de la C.U.A.S. Mancha Occidental II, como Fernando Rubio, presidente de la J.C.U. Valle del Almanzora, como José Andújar, presidente de la C.R. Riegos de Levante Margen Derecha, coincidieron en calificar como muy grave la situación de las cuencas del sur españolas, todas ellas con fuertes restricciones y con trasvases recortados en el caso de la cuenca del Segura (Tajo-Segura) y de la Cuenca Mediterránea Andaluza (Tajo- Segura y Negratín-Almanzora).

Además de un plan de obras de regulación, el presidente de Feragua demandó, como medidas a corto plazo, la optimización del uso de los recursos subterráneos en circunstancias de sequias para salvar la arboleda, la agilización y aprobación de un plan de incentivos de balsas de riego, y la reducción de los caudales ecológicos en circunstancias de escasez hídrica como ocurre en la actualidad. “Tenemos fuertes restricciones en el regadío y riesgo de recortes en abastecimiento. Y, sin embargo, los caudales ecológicos no se recortan para adecuarlos a la crítica situación hidrológica calificada de emergencia: es algo que no podemos entender”, aseguró Cepeda.

Por su parte, Jose Joaquín Gómez Alarcón, representante del Guadiana, reivindicó medidas de apoyo a la explotación de las aguas subterráneas y en particular, la necesaria participación y diálogo con las CUAS en la solución de los problemas de la cuenca del Guadiana. Fernando Rubio, representante de la Cuenca Mediterránea Andaluza hizo una petición de acceder a las aguas desaladas y regeneradas con costes asumibles para la agricultura, mientras que José Andújar, como representante de los regantes del Segura, pidió una política de trasvases que permita una mejor optimización de los recursos en España.

Adicionalmente, en la Jornada se pusieron de manifiesto por parte de destacados ponentes como Antonio Fanlo y Luis Garrote, la necesidad de un diálogo entra la administración hidráulica y los usuarios a la hora de fijar los caudales ecológicos en régimen de concertación y utilizando los métodos hidrológicos y biológicos más precisos, que los utilizados por el Ministerio para la Transición Ecológica en la planificación hidrológica actual.