Algunas se han reducido sin una adecuada justificación técnica, lo que puede suponer una disminución de facto de las dotaciones concesionales.

En sus alegaciones al Plan Hidrológico, Feragua demanda igualmente unas asignaciones de recursos adecuadas a todos los cultivos, rechazando las reducciones practicadas en algunas zonas regables del campo andaluz (CR Bajo Guadalquivir, CR B-XII del Bajo Guadalquivir en Sevilla, CR del Genil-Cabra en Córdoba, CCRR Vegas de Jaén, Guadalmena y Guadalen y Nuestra Señora de los Dolores en Jaén y CR de Albolote en Granada), reducciones que no están justificadas técnicamente y pueden suponer una disminución de las dotaciones concesionales.

Respecto a las dotaciones a los cultivos, Feragua destaca en sus alegaciones el incomprensible castigo a la fresa, a la que se le asigna una dotación deficitaria de 4.500 m3/ha, cuando estudios agronómicos de la Universidad de Córdoba justifican un consumo en función del tipo de suelos de entre 5.500 y 7.000 m3/ha, lo que exigiría dotaciones netas del entorno de 5.000 a 6.000 m3/ha. No obstante, hay que reconocer como un gran avance que el aumento de la dotación para el olivar superintensivo hasta los 3.500 metros cúbicos por hectárea y la del almendro hasta los 5.400 m3/ha. Además, es positivo que se incluyan 4.500 m3/ha para el algodón y 1.290 m3/ha para el viñedo (dos cultivos que el anterior plan no incluía).