Este volumen supone una restricción para el regadío del 50%, lo que nos da pistas sobre la decisión que tomaría la CHG si los embalses del Guadalquivir se quedaran como están.

La Comisión de Trasvase del Negratín ha aprobado de forma provisional un trasvase de 21,4 hm3, de los que 7 hm3 irían para el abastecimiento (sin ningún nivel de restricción), y el resto sería para el regadío (con un nivel de restricción del 50%). La noticia nos interesa, porque es relevante en sí misma para nuestros intereses y también porque nos da pistas sobre el criterio que podría seguir la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir en caso de que la situación hidrológica no mejore, algo que esperemos no ocurra.

Pero si, contra los pronósticos meteorológicos, la primavera y lo que queda de invierno se presentan secos y no se producen aportaciones en los embalses, el escenario que podríamos encontrarnos es de unas restricciones del 50%, lo que supondría unas dotaciones entre 2500 y 3000 m3/ha. Es decir, una campaña muy dura, por lo que conviene tener precaución y realizar una planificación de cultivos coherente con la situación hidrológica que tenemos, que, a pesar de la mejoría, sigue siendo de alerta en el Guadalquivir.